Carlus Groves: El hombre que desquició a Shaquille fue útil en Vitoria


En Vitoria siempre han tenido una extraña (y maravillosa) habilidad para sacarse jugadores de la manga a los que han sabido sacar provecho cuando nadie lo espera. Esto no es de ahora, sino de hace cuarto de siglo. Un ejemplo de la temporada 95-96 es Carlus Groves, que tiene una buena historia que es de interés internacional.
Groves no era gran cosa, pero tampoco engañaba a nadie. Con sus 2,01, carecía de tiro para jugar por fuera, pero le gustaba ir al choque y reboteaba decentemente como ‘4’. Su etapa universitaria estuvo marcada por un momento salvaje. En la temporada 90-91, en la primera eliminatorias por el título de la NCAA, su universidad, Tennessee, se enfrentaba a la LSU del ya arrollador Shaquille O’Neal, que narra el momento en su biografía ‘Uncut’: “Íbamos ganando por 22 puntos de diferencia y yo estaba dominando a un tipo llamado Carlus Groves. Cogí el balón en el poste y él me empujó y me agarró, tratando de tirarme al suelo. Me volví loco e intenté romperle la mandíbula”.
La bronca que se montó fue monumental, con jugadores de los banquillos de ambos equipos enzarzados en la pelea y Groves salvando milagrosamente la vida. Diez jugadores fueron sancionados fueron sancionados, entre ellos O’Neal, que no pudo jugar la siguiente ronda contra Kentucky y su equipo, claro, perdió.
Nuestro protagonista de hoy tenía fama de ‘broncas’, efectivamente. Un año y medio después fue apartado del equipo y tuvo que terminar su periplo universitario en San Diego State. No debe haber muchos jugadores que hayan pasado cinco años en la NCAA.

Su salto al profesionalismo se produjo a continuación, en el León 94-95, y no consiguió terminar la temporada. El equipo prefirió repescar a Reggie Johnson, con 37 años, que mantenerle a él y a una aportación que estaba siendo más baja de lo esperado: 10 puntos y 5,9 rebotes en 25,8 minutos.
Con una salida así, pocos pensaban que pudiese regresar a la máxima categoría, pero lo hizo. Y además, en un ‘grande’, el Tau, de la manera más insospechada. Groves empezó la 95-96 en Turquía, donde fue cortado, y luego se incorporó al Arrasate, cuando la EBA era la segunda categoría nacional. Los problemas de lesiones de Kenny Green eran cada vez más frecuentes y se le reclamó a él para primero completar los entrenamientos y luego echar una mano en los partidos, pocas veces con papel protagonista (6,2 puntos y 3,2 puntos en 13 minutos). Aunque no estaba inscrito, vivió de cerca la victoria en la Copa Saporta. Luego, el equipo ya no daba para más y cayó en cuartos de final de Liga ante el Barça, aunque forzando el tercer partido.
A partir de entonces, su carrera tuvo una enorme peculiaridad: solamente jugó en equipos de América Latina. Dominaba perfectamente el idioma y llegó a conseguir la nacionalidad mexicana, el país en el que más tiempo estuvo. También lo hizo en Argentina, Puerto Rico (donde dio positivo), Venezuela y Paraguay. Su último club registrado es el Potros ITSON mexicano, en la temporada 2008-09.
Por lo que parece, se quedó a vivir en México, quizás temiendo cruzarse algún día con Shaquille O’Neal...
